jueves, 25 de marzo de 2010

Carta 1 en tu ausencia


Hoy no quiero dormir,  
no quiero descubrir si realmente podría cerrar los ojos, 
no quiero saber a qué huelen las sábanas si no es a ti, 
no quiero acariciar otra cosa que no sea tu cuerpo cuando el mío siquiera toque la cama,...
Hoy solo quiero impregnarme de esa ausencia, de la tuya, 
la que guardas cuando ya no estás, 
hoy solo quiero besar un recuerdo, 
sentir el vacío que deja tu piel,...
Hoy solo quiero llorar un silencio, 
lamentar un hueco, 
retorcerme de un sueño sin ti, 
y llenar mis pulmones de vacío y escuchar un latido sin ritmo 
si es que no estás tú...
Quiero dejar en suspenso mi alma
ansiando y esperando la tuya en algún lugar donde ni tú ni yo sepamos, quizás a medio camino, en un cruce, en un semáforo, en el bar de la esquina, en un parque, ... quizá allí donde se encuentren, 
y quizás por eso ahora no encuentre a mi alma, 
tal vez te busque por querer dormir hoy contigo.

jueves, 18 de marzo de 2010

SILENCIO

Asomaba una palabra del carmín de sus labios,
pero hizo todo lo posible por evitar esa fr
ase,
mordiéndose los labios,
sugetándola con las manos.
No, no saldría...
No quería volverla a saborear, no quería volver a relamerse en cada una de sus letras.


Quizás hubiera sido mejor decirla, ... porque sigue en su interior, se repite como una cancioncilla aprendida, como un verso interiorizado.
Ya no es sólo una frase, ya le puso melodía...


Pero la acalla, y estás delante y lucha por no decírtela.
Y te acercas y aún chirrían los dientes por retenerla.


Si supiera cuántas veces lloró y rió en la misma cama,
cuántas veces la sostuvo en su boca, con sus manos, con sus pies, y sus ojos... cuántas veces fue dulce y cuántas veces un grito que nunca se oirá...


Pero caminas, sueñas, comes, compras, vives tu vida, sigues andando con dirección o sin ella, ... y ahí está, esa palabra, esa palabra que ni siquiera te inquieta porque no la conoces, porque ella aún la guarda, en la mirada, en cada recobeco de su cuerpo y de su alma, escrita en este papel, sobre estás líneas sin tinta, sobre el banco garabateado de un parque, sobre un tiquet, sobre la arena que borró el mar,... sobre mi boca...





Selene P. A.